La copa presidente de taekwondo es uno de los eventos que mejor reputación han logrado construir en poco tiempo. Y es que, lo que sea de cada quién, los gringos conocen bien su negocio y saben los secretos para acrecentar cualquier evento mediante producción y mercadotecnia. Hoy día, este torneo es algo muy parecido al U.S. Open, al menos en percepción, y eso ya son palabras mayores considerando la tradición, reputación y las fotos sexys en bikini que tendría este último si fuera una modelo de instagram.
Es un gusto ver que en este deporte hay eventos que logran posicionarse a pesar del “muy nutrido calendario de eventos de la WT(F)” [Iván Fernández dixit], como es un gusto saber que hay mexicanos en 14 de los 20 podiums que tuvo esta copa (Formas incluidas).
Pero no, mis queridos tres o cuatro lectores, no vine aquí a hablar de los resultados de un evento, digo, no es que nunca lo haya hecho ni que no lo amerita, pero es que durante esta última semana me di cuenta de que hay algo en lo que los mexicanos le ganamos a los gringos: el caradurismo, la hipocresía y, en palabras de mi abuelo, la falta de madre.
“Pero doc, ¿de qué está hablando?”
Calma…
La CONADE y algunas federaciones (TKD incluida) están siendo sujetas a una investigación que corre a cargo de la Secretaría de la Función Pública, que se encarga de velar por los intereses de los recursos de la nación. Es decir: se encarga de que nadie que utilice dinero público se haya pasado de lanza en la utilización del mismo. Esto no debería de sorprender a nadie porque estuvo sonando fuertísimo en los medios de comunicación hace un par de meses, si usted no se enteró, pase a enterarse aquí.
Por culpa de este escándalo y de la supuesta política de austeridad que el gobierno mexicano ha estado implementando en todas las áreas, los recursos de CONADE no están saliendo con la velocidad que se necesitan… Y vaya que el TKD mexicano va necesitar recursos de emergencia después de la cagada que hicieron al no inscribir al equipo en el Grand Prix de Bulgaria y haber comprometido la calificación directa de algunos pesos a JO (Si usted no sabe de qué estoy hablando, no se preocupe: disfrute el Grand Prix, sin México, que es este fin de semana y nos vemos por aquí el siguiente miércoles).
La Copa Presidente es una bocanada de aire fresco para nuestro país después del error de Bulgaria pues ostenta la categoría G-2 para la suma de puntos en el ranking. Pero… Imaginemos por un momento que no hay presupuesto en la CONADE y/o que los recursos se atoran y no logran salir a tiempo. Bueno, pues esto pasó, aunque no sé exactamente cuál de los dos escenarios, pero el punto es que no había recursos.
Insisto con el error de Bulgaria: la Copa Presidente pasó de ser un evento de paso para México a uno fundamental para la suma de puntos en el ranking.
En el escándalo de hace meses se nos explicaba que las federaciones metían eventos de emergencia para ser aprobados, obviamente el dinero no salía a tiempo y se viajaba con recursos conseguidos por otro lado, pero después CONADE lo re-embolsaba aunque los precios de avión, hospedaje y comidas estuvieran evidentemente inflados.
¿Qué fue lo que hizo la h. federación mexicana cuando se enteraron que el dinero para asistir a Las Vegas no iba estar disponible a tiempo? Pues lo que hacen siempre, pero con una diferencia: esta vez no consiguieron (O no quisieron conseguir) este recurso por otro lado, sino que fueron los mismos atletas los que tuvieron que pagar por su vuelo. Así es: le pidieron a los competidores que pagaran su vuelo, no sé si es el caso de todos, pero sé que pasó.
Digo, esto no tendría por qué ser un escándalo, ¿cierto? FALSO… Y aquí viene el contexto, oh, sí, el contexto: ese caballero de brillante armadura vestido de negro cabalgando en su noble corcel hacia el ocaso…
Un vuelo redondo a Las Vegas comprado con un día de anticipación cuesta, más o menos, 6 mil pesos y eso ya es un precio elevado por la premura. A los atletas mexicanos que usted vio subir al podium en la Copa Presidente el boleto les costó la inmamable cantidad de $15,989 mexican pesos.
Pero eso no es todo, en el colmo de la ignominia los atletas tenían que comprar el boleto con una agencia de viajes que se llama “Link Travel International”, so pena de que no les re-embolsaran ese dinero… ¿Ya más o menos se va viendo la punta del iceberg o necesitan más? Bueno, pues aquí tienen más:
Dejando de lado el caradurismo de cobrarle a los atletas una cantidad infamemente sobregirada para re-embolsárselas después (Y embolsarse ellos la mitad), tenemos a la agencia de viajes que hizo su agosto vendiéndoles estos vuelos.
La agencia misma es un chiste. Y es que basta con darse una vuelta por su presencia en la web. Para empezar tienen dos páginas: una en Wix y otra con su dominio oficial:
¿Cómo sé que es la misma agencia? Muy fácil: en ambas tienen la misma dirección física. Esta es una foto de sus oficinas. Cualquier parecido con una van negra con la leyenda "dulces" pintada con aerosol sobre la puerta corrediza es mera coincidencia:
En su página de facebook dicen que empezaron en 2014 y, en efecto, su dominio data del 25 de octubre de ese año, pero su página en FB la abrieron el 28 de agosto de 2019 (Dos meses después del escándalo de la CONADE):
De facebook también podemos ver que, a pesar de que tienen una página con dominio registrado, los enlaces apuntan a la página de Wix…
Del instagram mejor ni hablamos, su primera publicación fue el 31 de julio de este año. Tienen 16 publicaciones desde entonces y los mismos dos likes en cada una de sus fotos. Excepto en la primera que tienen un like más. Estas son las cuentas, sobra decir que son cuentas protegidas. Además de que la página de la empresa no es una página de empresa per-sé, sino que pertenece a Juan Arévalo, ¿quién es ese señor? Pues… Alguien:
¿De verdad les cuesta tanto trabajo no ser tan burdos? Además de ratas, son estúpidos. Esta información yo la obtuve husmeando 10 minutos por la web…
Ahora, ¿qué pasa si en vez de 10 minutos navego un par de horas? Pues resulta que todo empieza a tener sentido y el iceberg resulta ser de esos que hunden barcos que ni Dios puede hundir…
Durante el escándalo de hace unos meses se hablaba de que todos los movimientos se hacían a través de una agencia de viajes llamada “Volare Travel Shop”, otra chulada de agencia con tintes muy parecidos a link travel en cuanto a redes sociales se refiere, pero descubrí algo más: ambas utilizan el mismo motor de búsqueda para ofrecer sus viajes, se llama eConsolid.
“eCONSOLID es una alternativa para la creación y desarrollo de un sitio web para tu agencia de viajes y para obtener presencia en internet. Tu sitio web eConsolid estará siempre actualizado con los mejores paquetes y promociones a la venta. El cliente final te contactará directamente a través de los datos que publiques de tu agencia. Contarás con el soporte de CONSOLID México para generar y cerrar todas tus ventas”.
¿Saben qué significa esto? Que todos los paquetes que ofrecen las agencias ya existen, están pre-cargados. Es decir, de agencias de viajes tienen lo mismo que yo de caballero Jedi, son simples forwarders, o revendedores para que me entiendan. Y otra cosa: este sistema no requiere que haya un ser humano haciendo el trabajo, por ser forwarders ya alguien lo hizo por ellos, la agencia sólo cobra. Una maravilla, si me permiten decirlo.
La página de Econsolid está creada por una agencia digital llamada MECA que pertenece a su vez a la asociación del internet .MX, que pertenece a su vez a la World Trustmark Alliance que pertenece a su vez a la Avanta Asian Pacific QUE NO EXISTE. Si alguien está familiarizado con cómo se hace el lavado de dinero para que NO TE DESCUBRAN es justo así: a través de empresas vinculadas a otras empresas hasta que topas con una QUE NO EXISTE y por lo general está en otro continente… Después de todo no son tan brutos… Bueno, algo, porque yo descifré esto aplastado en mi computadora mientras me tragaba una Maruchan de camarón.
La cereza en el pastel es que link travel ofrece viajes a Las Vegas por $159 usd + $260 usd de impuestos y te incluye vuelo redondo, cinco días y cuatro noches de hotel (Aunque no sé cuál hotel). Y aunque es claro que sólo un imbécil compraría algo por lo que tiene que pagar más impuestos de lo que cuesta el servicio original, $419 dólares son, más o menos, $8,300 pesos mexicanos, una cifra bastante lejana a los casi 16 mil que les cobraron a los atletas sólo por el avión.
Y además estuvieron de suerte porque el primer viaje que la agencia ofrecía para ir a la ciudad del pecado este año fue nada más y nada menos que el domingo 6 de octubre, justo la fecha en la que el equipo mexicano llegó a los United.
No sé ustedes, pero a mí esta situación me da asco. La forma en la que se utiliza a los atletas es nefasta. Ya suficiente es con tratarlos como máquinas de medallas como para que ahora también sean ellos los que financien sus propios viajes y mantengan vigoroso algún bolsillo.
¿Saben qué es lo peor? Que siendo atleta uno tiene que preocuparse por entrenar, no estarse llenando la cabeza con estas pendejadas.
¿Pero saben qué es todavía peor? Que esto no va parar… Aunque sí podría detenerse si se lograra involucrar a una autoridad judicial competente.
Amigo atleta: si me estás leyendo aquí abajo tienes mis redes sociales para que puedas contactarme, tú encárgate de entrenar, yo me encargo de lo demás.
No, mi trabajo no es exterminar a las cucarachas, mi trabajo es prender la luz para que todos puedan ver que las cucarachas están ahí… Y asegurarme que cuando se prenda la luz haya alguien que los pueda llamar a rendir cuentas. Alguien que sí se encargue de verdad de la plaga.