Hace casi exactamente un año, México obtuvo dos plazas para participar en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 en el deporte de Taekwondo, creo que la historia la conocen todos, no hace falta dar mayores detalles.
Se sabe que quienes van al torneo clasificatorio lo hacen por convicción, ya que los cupos que se obtienen en estos eventos no son para el atleta, sino para el país, no hace falta dar mayores detalles, pero en caso de no conocer de qué va ese proceso, por favor diríjase al semanario número 20.
En abril 2020 faltaba más o menos el mismo tiempo que ahorita para que los JO se realizaran, de hecho había regiones del mundo que todavía no realizaban sus clasificatorios, pero como #DestinyIsABitch, pues nos cayó encima la pandemia del COVID y todo se fue al diablo. De hecho, sigue habiendo regiones del mundo que siguen sin realizar su clasificatorio.
Desde aquel, ya lejano, abril en el que el mundo se cerró, ha existido el debate acerca de las desventajas que han tenido los atletas no clasificados por encima de los que ya tienen su nombre asegurado en la competencia de los aritos, pero como dice el clásico: “No podía saberse”.
Los clasificados americanos han tenido un año completo de ventaja de entrenamiento sobre, por ejemplo, los europeos que a penas van a realizar el campeonato clasificatorio y por ende a definir quién va y quién se queda... Bueno, los clasificados americanos excepto algunos cuantos que aún no definen el nombre. Y es que no conozco casos concretos en otros países, pero conozco muy bien el caso específico de México: aún no se sabe quién irá a participar en la categoría de +67 kg. femenino.
Por un lado tenemos a Briseida Acosta, quien es una prominente atleta del peso pesado y que consiguió el pase para México. Por el otro lado tenemos a María Espinoza, que, bueno, es la leyenda, no hace falta repetir su currículum que sigue acumulando títulos al día de hoy.
¿Quién será la que vaya a Tokyo? No se sabe. Así, tal cual.
Ya salió la h. Federación Mexicana a decir que va ser por evaluación, y que va ser en junio, pero nada más. No se conocen muy bien los pormenores técnicos, no se sabe todavía la sede, ni la fecha exacta, es más, no se sabe nada, de hecho cada vez se sabe menos, porque la fecha tentativa de junio la anunciaron en un tuit que ya no está disponible...
En enero, Poncho salió a decir lo siguiente en un medio de comunicación: "Estamos checando (Que la evaluación sea) entre el mes de mayo y junio y una de las virtudes que tenemos es que las dos atletas es que tienen mucha experiencia, entonces esto nos va a dar la oportunidad de alargar un poquito más esa fecha como filtro final y darles la mejor preparación para que ellas estén en su mejor forma física en esa competencia". Esta declaración me parece bastante desafortunada, y eso lo digo porque Poncho es mi amigo. De hecho, el fundamento bajo esa premisa es francamente estúpido porque entonces el evento fundamental de ambas atletas, bajo ese supuesto, son los JO y la evaluación sería como un trámite, el problema es que quien pierda la evaluación se queda sin JO, así de simple.
Me resuena el 2008 cuando la selección nacional estaba dividida en dos: por un lado los Salazar y por el otro Onofre y Gato con el resto del equipo. Ambos bandos presentaron ante CONADE su plan de trabajo para ese año: Gato expuso que la preparación estaba enfocada en la evaluación como evento principal; los Salazar expusieron que “a diferencia del otro equipo” su preparación estaba enfocada en los Juegos Olímpicos. Los resultados todos los conocen: el equipo Salazar llevó a Idulio a Beijing y “el otro equipo” se trajo dos medallas de oro de ahí mismo.
Y es que es lógico: no puedes pensar en prepararte para unos JO como evento principal si tienes un filtro antes... Y tampoco puedes prepararte óptimamente para unos JO si el filtro mencionado te va dejar sólo un par de semanas como margen de maniobra... Pero yo qué voy a saber.
Aunque, bueno, la lógica no es algo que se le dé muy bien a esta administración, una raya más al tigre...
A lo que voy es que, si de todas formas iba haber evaluación, ¿por qué hasta junio? Ya perdieron un año entero que se pudo haber aprovechado con quien quiera que hubiese sido la ganadora de la evaluación, no digo que hicieran la evaluación en pleno apogeo de la pandemia, pero bien se pudo haber hecho en enero, digo, ya que empezaron con los eventos presenciales, pudieron haber empezado justo con esa evaluación, pero no, dejaron pasar un año entero, ahora quedan tres meses que también van a dejar pasar.
María y Briseida ¿se están preparando para la evaluación o para los Juegos Olímpicos? Si es para la evaluación, a quien gane le van a quedar pocas semanas rumbo a Tokyo; si se están preparando para los Juegos Olímpicos, ¿dónde entra la evaluación? ¿Y si pierden? Porque una va perder...
EN EL CAMINO
Hablando de María y Briseida, esa evaluación (Si es que se hace) sea probablemente la última vez que veamos pelear a cualquiera de las dos... Al tiempo.
Que desmadre hay en WTPA, ¿no está al tanto? Escuche #IrreverenDO.