Toda la vida he dicho que tener árbitros mexicanos en los eventos internacionales es un lujo y no lo digo por un simple impulso nacionalista, lo digo porque hubo un tiempo en el que verdaderamente el trabajo de los referees mexicanos era envidiable y sobresalían en el extranjero por su capacidad y entrega, cosa que poco a poco ha ido en detrimento.
De hecho, y esto es algo que quizá a las nuevas generaciones les costará trabajo creer: hubo un tiempo en donde los referees eran parte del equipo de viaje de la selección mexicana, es decir, se iba a los viajes con el equipo de atletas, el cuerpo multidisciplinario, obviamente los entrenadores, algunos delegados arrimados, pero además uno o dos árbitros que viajaban, comían y eran parte del equipo mexicano para todos los eventos a donde se presentaba la selección. Las únicas veces que un árbitro no viajaba con nosotros era a los campamentos de entrenamiento, por obvias razones, ahí no se iba a participar en ninguna competencia. Pero sí, niños y niñas, los jueces solían ser una parte muy importante en la estructura del taekwondo mexicano, tanto que absolutamente todos los presidentes de federación mexicana hasta la fecha han sido referees.
¿Pero qué fue lo que pasó? No sabría decirlo a ciencia cierta, o más bien no sabría decir si fue sólo una cosa o varias… Lo que sí es evidente y se puede comprobar tan sólo viendo los combates del reciente Grand Slam Mexicano es que actualmente no existe una guía clara para los jueces en México y no se necesita ser un experto cuántico para poderlo deducir, como lo dije basta echarse un clavado a los videos de este último evento para darse cuenta de varias cosas… Y ojo, digo a este último evento porque es el más reciente al que asistí, pero seguramente todo lo que salió a relucir ya viene arrastrando desde tiempo atrás.
Empecemos por lo más obvio: el encargado de los referees en México no es un referee, desde aquí ya podemos empezar a torcer la boca, ¿pero cuál es el problema de que la cabeza en el puesto nunca haya ejercido? La respuesta para mí es bastante obvia, pero sé que hay muchos por ahí que son medio lentos, así que lo voy a explicar: para ser referee no se requiere solamente saberse el reglamento, yo mismo me considero una de las personas que mejor conoce las reglas y procedimientos del taekwondo olímpico en general y jamás me atrevería a pararme en medio de un área a ejercer como tal, pero más allá de no hacerlo por respeto a la figura que un juez me representa, no lo haría porque no tengo la vocación que es lo primero que se requiere para poder estar ahí.
Para quienes conocen un poco más a fondo el mundillo de los referees, saben que se requiere de una pasión especial y un amor muy característico por el deporte de los puños y las patadas para poder atreverse a estar ahí, más allá de la capacidad técnica que desde luego importa muchísimo, quizá más en este puesto que en cualquier otro. Lo dije antes y lo digo de nuevo: nadie ama este deporte tanto como un referee, ni siquiera los atletas y es algo que estaría dispuesto a debatir.
Dicho lo anterior se puede entender mejor por qué es una falta de respeto para el gremio y un insulto a la figura del juzgador el hecho de poner al frente de ellos a alguien que no tiene la más mínima idea de los sacrificios que implica el título de referee. Ahora bien, rescatando como siempre a los clásicos: “la culpa no es del indio, sino de quien lo hace compadre”, no es extraño que Billy the Kid, a pesar de él mismo ser referee (claro, porque entre la fruta siempre hay una podrida), haya puesto a alguien así, pero no por su capacidad, sino por la lealtad hacia él mismo… Que asco me da este cabrón.
En fin, continuemos… Una de las cosas que pude notar en el Grand Slam es que hay errores generalizados en la manera en la que el cuerpo de árbitros del CONAFT hace ciertas marcaciones, lo que significa simple y sencillamente que han tenido una mala guía y es de esperarse, puesto que dentro del cuerpo de árbitros de la FEMEX hay muy pocos que están activos de manera internacional y hay todavía más pocos que están actualizándose de manera recurrente. Irónicamente a quienes sí tienen esta experiencia activa es a quienes menos se les convoca y además el encargado de convocarles ni siquiera es Yaseff Zamora, en la mayoría de los casos son los profesores Nubia Segundo y Jorge Reynoso que dicho sea de paso no tengo ni idea del puesto que ostenten actualmente de manera oficial en federación y dicho sea de paso también, este año no los vi en ningún evento internacional, salvo a la profesora Nubia en la Universiada Mundial, evento G1 y el mundial de parataekwondo en donde está dentro del top para Juegos Paralímpicos. Al profesor Reynoso lo vi en el experimento por equipos que hizo WT en Goyang y estaba también en el mundial de Baku, pero como delegado, no como juez, por eso me extraña que hablé con tanto desdén y mala leche de las sanciones a los referees mexicanos en aquel evento sin el contexto completo, pero esa es otra historia y debe ser contada en otra ocasión…
En este último evento en el CNAR no estaba ninguno de los dos, de hecho llegué a ver tan sólo a cuatro referees internacionales, en un país como el nuestro es para que la mitad del colegio tuviera acceso a la corbata guinda, pero esa es la otra chingadera…
Para poder acceder a ser referee internacional necesitas hacer una evaluación, de esas hay todos los años y en diferentes partes del mundo, el problema no es ese, el problema es que, al igual que hacen con los atletas, federación mexicana no está dando los avales para que sus propios jueces salgan a capacitarse y aunque a nivel WT no se requiere de un aval local como tal para poder tomar el curso de IR, sí es necesaria una GAL y ahí es donde la puerca torció el rabo pues es la federación mexicana la que la tramita y últimamente sólo ha atinado a negarla. La última camada de referees mexicanos que hicieron el curso de IR fue el año pasado en Colombia y a pesar de que sí hubo algunos jueces mexicanos que tomaron el refrescamiento, los más recientes jueces internacionales mexicanos no lo hicieron con la GAL de México, sino de Cuba… A esto hemos llegado.
El siguiente curso de WT para IR será en enero aquí en México, de hecho en Querétaro y será para IR de Poomsae. Ya hay más de 40 referees mexicanos inscritos, pero ninguno de federación mexicana, todos son de FEMEDEES. De hecho creo que su mamada esa del COCET y el CONAFT van a ser en esos mismos días, a pesar de que para estos últimos no se tiene fecha definida aún, siendo que el evento de WT se anunció por lo menos desde hace cuatro meses.
Son este tipo de cosas que no alcanzo a entender, el hecho de tener un colegio de árbitros fuerte debería ser fundamental, ya ni siquiera para una federación sana y que opere con normalidad, incluso para una federación de mierda como esta el tener un colegio de árbitros bien capacitado y con experiencia internacional podría salvarles el pellejo bajo varias circunstancias, pero ni siquiera eso alcanzan a ver… Me rebasa y me desespera.
Así que la crisis del taekwondo mexicano es incluso más profunda de lo que parece, sin embargo en el aspecto de los jueces hay esperanza. Un referee internacional no necesita PARA NADA a una MNA detrás de él simple y sencillamente porque detrás tiene a WT, y en México ya muchísimos jueces le han dado la vuelta a la federación, así que este mensaje es para aquellos que siguen encerrados en la esperanza de que las cosas cambien y puedan hacer su carrera de árbitros como debe de ser: no se va poder mientras Billy siga al frente, pero eso no es impedimento para que puedan llegar a lo más alto, así que no dejen de capacitarse y seguir creciendo, al final la carrera individual es lo que cuenta.
Y al final también van a estar solos, pero así es esa carrera, ustedes lo deben saber. Y a pesar de toda esa ingratitud que viene junto con el paquete de portar el saco azul y la corbata guinda también viene toda la gloria individual que sólo ustedes saben lo que cuesta y lo que significa, no sacrifiquen eso por un montón de imbéciles que no tienen la mínima idea al respecto…